Los perros pueden verse afectados por una amplia variedad de enfermedades, algunas específicas de la raza, mientras que otras son más comunes en ciertas edades o áreas geográficas.
En este artículo, exploraremos algunas de las enfermedades caninas más comunes y sus síntomas asociados.
Los perros pueden sufrir una variedad de enfermedades infecciosas que son causadas por microorganismos como virus, bacterias, hongos y parásitos. Algunas de las más comunes incluyen el parvovirus canino, el moquillo canino, la leptospirosis, la enfermedad de Lyme (causada por la picadura de una garrapata infectada) y la rabia.
Es muy importante respetar y cumplir el calendario de vacunación y tomar medidas preventivas para mantener el nivel de calidad de vida de tu mascota. Como el control de pulgas, evitar el contacto con animales enfermos o desconocidos, mantener la higiene de la mascota y de su zona. Nuestros veterinarios ofrecen servicios de asistencia, entre ellos el de vacunación.
Cuando se trata de enfermedades infecciosas en los perros, hay una serie de señales a las que debes prestar atención. Además de la pérdida de apetito, fatiga, fiebre, vómitos y diarrea, es importante estar al tanto de otros posibles síntomas. Esto incluye secreción nasal u ocular, úlceras en la boca o la piel, lesiones cutáneas, ganglios inflamados, dificultad para respirar e incluso cambios en la descarga vaginal en las perras. Reconocer estos signos y llevarlo a su veterinario tempranamente puede marcar la diferencia en la pronta recuperación de tu fiel compañero.
Si sospechas que tu perro tiene alguna infección es crucial que contactes a un veterinario para recibir un diagnóstico preciso y un tratamiento oportuno. Si aún no tienes un veterinario de confianza te invitamos a leer una guía para elegir un buen profesional.
A continuación te contamos las enfermedades más comunes según cual sistema es afectado:
La piel de los perros es el órgano que los protege del mundo exterior. Está constantemente en contacto con microorganismos y alérgenos ambientales como bacterias, hongos y parásitos (como ácaros y pulgas). Por lo tanto, es muy común que desarrolle una afección. Las reacciones alérgicas pueden manifestarse en la piel y causar una variedad de problemas cutáneos. La piel es parte integral del sistema inmunológico por lo que cualquier debilidad en este sistema puede hacer que los perros sean más propensos a infecciones cutáneas.
Entre las enfermedades cutáneas más comunes se encuentran la dermatitis atópica (alergias) y la dermatitis por pulgas, que pueden manifestarse con síntomas como enrojecimiento, picazón o irritación de la piel.
Las infecciones bacterianas e infecciones fúngicas también son comunes, a menudo como resultado de alergias, heridas o condiciones ambientales. Estas infecciones pueden provocar enrojecimiento, inflamación, secreción de pus. Además, los ácaros de la sarna pueden causar picazón intensa, pérdida de cabello y costras en la piel.
Si detectas enrojecimiento, verrugas o irregularidades en la piel de tus mascotas no dudes en consultarlo con un veterinario. Lo mismo aplica si observas que se rasca con frecuencia. Es crucial cuidar la piel de los perros para mantener su salud y bienestar general.
Recuerda estar atento a cualquier cambio en la piel de tu perro y no dudes en consultar a su veterinario si notas algo fuera de lo común. La atención temprana puede ayudar a prevenir problemas mayores y mantener a tu amigo peludo saludable y feliz. Entre nuestros servicios veterinarios se ofrecen los baños caninos y peluquería realizado por profesionales que si detectan algo en el pelaje de tu perro te lo harán saber de inmediato.
Las enfermedades del sistema respiratorio pueden afectar la nariz, la garganta, los pulmones y otros órganos respiratorios.
Algunas de las enfermedades más comunes son la tos de las perreras, otitis (infección en el oído), el asma y la bronquitis crónica.
La dificultad para respirar, la tos, la congestión nasal, la fatiga, fiebre, pérdida de apetito y secreción mucosa (ojos, nariz o boca) son los síntomas generales más comunes que pueden indicar que tu perro está atravesando una enfermedad respiratoria.
Los problemas digestivos son comunes en los perros y pueden abarcar una variedad de afecciones, que incluyen la enfermedad inflamatoria intestinal, la pancreatitis y el síndrome del intestino irritable.
Estas condiciones pueden causar malestar abdominal, vómitos y diarrea, y en casos más graves, pueden llevar a complicaciones como deshidratación y pérdida de peso.
Es importante estar atento a cualquier cambio en el comportamiento alimenticio o en los hábitos intestinales de tu perro, y consultar a un veterinario si observas algún síntoma preocupante. Un diagnóstico temprano y un tratamiento adecuado pueden ayudar a gestionar y controlar estos problemas digestivos para mantener la salud y el bienestar de tu mascota. En nuestro blog tenemos un articulo sobre recomendaciones generales para la alimentación de tu mascota. En nuestra web contamos con veterinarios que ofrecen el servicio de asesoramiento en nutrición.
Los perros también pueden sufrir de enfermedades neurológicas como la epilepsia, la degeneración cerebral y la hernia discal.
Estas enfermedades neurológicas pueden provocar convulsiones, pérdida de coordinación, debilidad, dolor y otros síntomas que afectan el comportamiento y la calidad de vida de nuestras mascotas.
Los perros también pueden padecer enfermedades cardíacas, como la enfermedad cardíaca congénita, la enfermedad valvular y la insuficiencia cardíaca congestiva. Los perros mayores y aquellos con sobrepeso son especialmente susceptibles.
Estas enfermedades cardíacas afectan el funcionamiento normal del corazón, lo que puede conducir a una serie de síntomas que afectan la calidad de vida de los perros y, en casos graves, pueden ser potencialmente mortales si no se tratan a tiempo y adecuadamente.
Algunos de los síntomas generados por problemas cardíacos son por ejemplo la dificultad para respirar, tos persistente, cansancio generalizado, latidos irregulares, abdomen hinchado, encías azuladas.
Si observas alguno de estos síntomas en tu perro, por favor consulta con un veterinario porque podría relacionarse con una enfermedad cardiaca.
Los perros también pueden padecer enfermedades en articulaciones y huesos, como la displasia de cadera y la osteoartritis.
Estas condiciones pueden generar dolor, cojera, rigidez articular y dificultad para moverse en nuestras mascotas, afectando su calidad de vida y su capacidad para disfrutar de actividades diarias.
Las enfermedades del sistema urinario, vejiga y riñones principalmente, más comunes en perros son: infección del tracto urinario, la enfermedad renal, la insuficiencia renal y los cálculos urinarios.
Si se observa mayor frecuencia para orinar y que ésta sea con dificultad o con urgencia, puede interpretarse que su mascota está teniendo dolor. Puede haber cambios en el apetito y comportamiento. Si se observa sangre en el orín, inmediatamente consultar debes con un veterinario.
Los animales como los humanos poseen en su organismo un sistema endocrino que genera hormonas para mantener el correcto funcionamiento del organismo. Cuando estas glándulas fallan pueden generar enfermedades como la diabetes, Addison y Cushing.
Los síntomas como aumento o disminución del apetito, sed excesiva, pérdida o aumento de peso inexplicable, letargo, cambios en el pelaje y problemas en la piel pueden indicar un posible desequilibrio hormonal. Además de los síntomas mencionados el veterinario tendrá que realizar pruebas de laboratorio para confirmar este tipo de condiciones.
No subestimes la importancia de las visitas regulares al veterinario, esto es importante para que tu mascota y el veterinario generen un vinculo, así será más sencillo para el veterinario detectar cualquier problema de salud de manera temprana y abordarlo de manera efectiva. Además, asegúrate de mantener al día las vacunas y tratamientos preventivos recomendados por tu veterinario para proteger a tu perro contra enfermedades comunes y parásitos.
Por último, pero no menos importante, brinda a tu perro un ambiente seguro y confortable en el hogar. Esto incluye proporcionarle un lugar tranquilo para descansar, asegurarse de que su entorno esté libre de peligros y toxinas. También dedicarle momentos de tu día para estar con él, hacer alguna actividad juntos y brindarle amor para mantener su bienestar emocional.
Siguiendo estos consejos simples pero importantes, puedes ayudar a garantizar que tu perro disfrute de una vida feliz, saludable y llena de vitalidad.
¡Tu amigo canino te lo agradecerá con compañerismo incondicional!
Atención: Si sospechas que tu mascota está enferma te recomendamos buscar atención veterinaria. La información que describimos no es exhaustiva, existen otras enfermedades caninas. En nuestra web Veterinarios encontrarás información de diversas clínicas, servicios veterinarios y servicio de atención 24hs. Si aún no tienes un veterinario particular para tu mascota puedes leer en nuestro blog nuestra Guía para elegir un buen veterinario.
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